Pensamiento sobre el bailarín

Por Jorge Tabares

Recorren sus huellas muchas veces en la misma pieza siendo el mismo cuerpo pero nunca el mismo gesto.

Si la filosofía viera más a la danza podría entonces explicar el devenir. La existencia es como el baile, la rebeldía de quien como el fuego, convierte su ser en movimiento, se agota a sí mismo logrando balancear el tiempo y el espacio bajo sus pies, entre sus brazos y entre su cuerpo.

A veces me pregunto si quien danza está consciente de todo lo que implica su sistema reaccionando al sonido o si arrojados infinitamente al ahora (simplemente), como si la simpleza fuera semejante entrega, viven el presente con tanta intensidad desde su cuerpo que encarnan en cada paso la conquista de la vida sobre la muerte sin tener que pensar en ello.

Tu que recorres tus huellas una y otra vez, que contra la línea infinita del horizonte te muestras como muchos instantes hilados, tu que como el fuego eres a la vez principio y consecuencia. Dime si cuando danzas te sientes tan inmortal como te muestras.